Panorama actual de la migración
Para hablar de mediación intercultural es necesario situarnos en el panorama actual de la migración.
Hoy día no hay muchas más migraciones que hace un siglo y, si a principios del siglo XX aproximadamente un 3% de la población mundial había abandonado su lugar de origen, a principios de este siglo XXI una de cada 35 personas en el mundo es un migrante internacional, lo que representaría un porcentaje similar según la Organización Internacional para las Migraciones (IOM, 2003).
La emigración es un derecho que se manifiesta como un fenómeno imparable vinculado a las importantes diferencias existentes entre las distintas regiones del mundo. Es un hecho evidente que las migraciones actuales no pueden entenderse sin hacer referencia a los procesos de globalización que afectan a las sociedades contemporáneas. El momento actual se corresponde con una segunda etapa de ese proceso, era de la movilidad, que debería favorecer los cambios necesarios para disminuir esas desigualdades regionales. Hoy día no existe un pueblo o nación que no sea heredero o resultante de una gran migración.
¿Por qué es importante la mediación en estos casos?
Descendiente de este proceso se presenta la discriminación de los grupos minoritarios emigrados por parte de los Estados y las sociedades de acogida, tanto a nivel social como laboral. La discriminación contra los trabajadores migrantes, ya sea por motivos étnicos o raciales, por procedencia nacional o por origen social, va en contra de uno de los principios fundamentales de la Declaración Universal de los Derechos Humanos que indica que todas las personas nacen libres e iguales en dignidad y derechos (Art. 1).
La Convención Internacional sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación Racial, aprobada por la Asamblea General de Naciones Unidas el 21 de diciembre de 1965, define la discriminación como “todas distinción, exclusión, restricción o preferencia basada en motivos de raza, color, linaje u origen nacional o étnico que tenga por objeto o por resultado anular o menoscabar el reconocimiento, goce o ejercicio, en condiciones de igualdad, de los derechos humanos o libertades fundamentales en las esferas política, económica, social, cultural o en cualquier otra esfera de la vida pública” (Art. 1).
Mediación intercultural
Recuerda que la interculturalidad tiene como propósito alcanzar una sociedad en la cual no se vulneren los derechos humanos y se camine hacia una convivencia pacífica y armoniosa entre todos los seres humanos. Esto sólo es posible afrontando el reto de la inclusión frente a la exclusión, apostando por la riqueza de la diversidad frente a la pobreza de la homogeneidad y reivindicando los derechos de todos, frente a los privilegios de unas cuantas personas, propiciando de esta manera un nuevo concepto de ciudadanía.
En el ámbito sanitario, por ejemplo, la existencia de condicionantes lingüísticos y culturales genera, en muchos casos, situaciones y conflictos que tiene por objeto cuestiones relacionadas con la enfermedad y la salud. Así pues, el mediador/a sociosanitario se enfrenta hoy a obstáculos que impiden desarrollar plenamente su labor: la ausencia de un reconocimiento formal como profesional de la mediación socio-sanitaria, la inexistencia de una normativa unificada que delimite sus funciones y competencias como parte del personal sanitario más allá del ámbito autonómico, así como de una formación reglada general y específica conllevan, entre otras circunstancias, que su figura sea equiparable (que no comparable) a la de un intérprete, o la de un trabajador social. Con todo, un manejo de varios idiomas capacita al mediador/a para desarrollar su labor de facilitador de la comunicación entre las partes, pero en ningún caso define su perfil profesional.
Especialízate en mediación intercultural
De ahí la importancia de especializarte como agente de cambio social y muy especialmente como mediador/a especialista en mediación intercultural, como así puedes hacer con nuestro curso de mediación.
Uno de nuestros retos es darte a conocer los ámbitos de acción del mediador/a intercultural y las posibilidades laborales que existen en esta área de la mediación para la resolución de conflictos tales como:
- Comunitarios: vecinales, asociaciones…
- En ámbitos educativos formales e informales
- En el ámbito sociosanitario
- Conflictos trasnacionales
- En el ámbito familiar
- Etc.
Si te matriculas en el curso de mediación de la Escuela Internacional de Mediación podrás analizar y adquirir habilidades para resolver conflictos interculturales como el siguiente:
En un colegio público de Granada con servicio de comedor para todos los alumnos/as, hay alumnos/as inmigrantes cuyos padres son musulmanes. La religión practicada por los mismos, no permite que sus hijos/as coman productos cárnicos que no sean provenientes de alguna carnicería halal (la cual contiene carne de animales que han sido sacrificados siguiendo el rito islámico, el cual dice que los animales deben ser sacrificados en nombre de Alah y mirando hacia la Meca). Y los padres de los niños y niñas cristianos/as no están de acuerdo con el hecho de que a sus hijos se les ofrezca un menú y a los niños y niñas musulmanes otro diferente.
Esto deriva en conflictos a nivel comunitario, ya que la asociación musulmana del barrio alza la voz aduciendo discriminación hacia su religión y poco respeto a sus principios. Por su parte, varios padres y madres de niños cristianos deciden que sus hijos/as no vayan al colegio hasta que se tome la decisión de que continúe el mismo menú para todos/as en el comedor.