En la última década, han entrado en vigor numerosas leyes desarrolladas principalmente en el ámbito de la mediación civil y mercantil, y es que ha sido fruto de la necesidad por parte de los profesionales de ofrecer sus servicios a la ciudadanía en materia de mediación como método alternativo de solución de gestión de conflictos y asentando las bases del funcionamiento obtenido por parte de los agentes intervinientes.
Es ahora cuando queda el mayor reto para alcanzar la mediación activa, aquella que es capaz de llegar a la ciudadanía y que es percibida como una herramienta de verdad efectiva.
Por eso, para popularizar y universalizar el uso de la mediación, se acaban de convocar ayudas para la implantación del ejercicio de 2022 en esa línea colaborativa y mediante el uso del Centro de Mediación de la Edificación, dependiente del colegio de Aparejadores.
De esta forma, se ofrecerá la posibilidad de que cualquier persona que decida explorar la mediación para resolver conflictos, pueda solicitar una evaluación específica por personal cualificado y acceder a una sesión informativa gratuita en las oficinas.
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