Se han encontrado «dificultades crecientes» para conseguir acuerdos en los diferentes hogares que se han visto afectados por la pandemia en la convivencia, así lo constata Agipase.
La crisis sanitaria no permite encontrar puntos de encuentro
La situación que se lleva viviendo desde los últimos meses, ha provocado que las familias lleven a cabo medidas a la hora de encontrarse con familiares. Existen muchos casos de abuelos que no pueden ver a sus nietos o peleas entre familiares por tener que cuidar a una persona dependiente, entre otras.
La ruptura de tejidos se ha diversificado de tal manera que casi dos años después de la pandemia siguen existiendo conflictos por esta.
Se está volviendo más complicado resolver conflictos entre partes enfrentadas en Gipuzkoa.
Arantxa Bergara comenta: «La crisis sanitaria ha provocado que cueste mucho más alcanzar puntos de encuentro. Es muy complicado hacerlo cuando cada una de las partes se sitúa en posesión de su propia verdad, sin ceder lo más mínimo».
Apoyo Integral a las Crisis Familiares
Para ofrecer apoyo a todas las familias que necesitan resolver los conflictos se está llevando a cabo la sede de la Asociación Guipuzcoana para el Apoyo Integral en las Crisis Familiares, donde los mediadores están respondiendo a las diferentes consultas.
Fueron un total de 1100 familias las que han sido atendidas de forma presencial por la asociación durante el pasado año, una cifra considerada bastante elevada.
Fuente: noticiasdegipuzkoa
